La tecnología y las relaciones laborales

Las relaciones laborales vinculan al empleado con el empleador y se definen como una interacción entre 3 elementos: el trabajo, el salario y el proceso productivo. El empleado pone el trabajo, el empleador el capital y el proceso de producción, y mediante el contrato se asegura que los detalles de esta relación se conformen a la ley. Sin embargo, los modos de trabajar cambian, y con ellos las relaciones laborales. Desde la pandemia, la tecnología transformó para siempre el mundo laboral, convirtiéndose en un factor determinante en la productividad y flexibilidad de los procesos. Por ejemplo, el teletrabajo es una modalidad laboral muy extendida, pues permite conjugar mejor la vida personal y la profesional. Se ha probado que aumenta la productividad y motivación al reducir los niveles de estrés de los trabajadores. Con el teletrabajo, aparecieron nuevas formas de control laboral. Estos servicios web le aseguran a la empresa que no pierde tiempo ni recursos. Adicionalmente, pululan plataformas y softwares de los que ya no puede prescindirse pues proveen precisión y rapidez a los procesos. Podemos esperar, entonces, que la tecnología seguirá afinándose para permitir que el trabajo se acople a las necesidades del presente.