Primeros auxilios para mascotas

Lo primero que debes considerar es que una emergencia veterinaria no siempre es evidente, hay que estar atento a síntomas como: temperatura que supere los 39,5°C por más de un día, dificultad respiratoria, sangrados de cualquier tipo y decaimiento (el animal no se mueve por tiempos prolongados ni para comer ni para ir al baño). Debes tener un botiquín con vendajes, gasas, suero fisiológico, termómetro, guantes, una sábana para transportarlos y, además, alistar el carnet de vacunas de tu mascota. Frente a un ahogo, revisa que las vías respiratorias no estén obstruidas, fíjate en la temperatura y rigidez del cuerpo. En caso de intoxicación con un producto que hayas identificado, asegúrate de llevarlo al veterinario para que sepa cómo proceder. Si hay convulsiones, graba el episodio para llevarlo a la consulta y evita que se golpee la cabeza. Para heridas abiertas, lava con agua y jabón, quita el pelo que haya incrustado y no tapes. No se debe, en general, intentar alimentarlos o suministrarles medicamentos a la fuerza, pues podrías empeorar la situación. Los primeros auxilios solo buscan estabilizar mientras te diriges cuanto antes a un veterinario de confianza.