Tu primer día de trabajo

No importa la edad que tengamos, los nervios y las expectativas de ser el nuevo no envejecen, sobre todo cuando incursionamos en un nuevo empleo, pues hay mucho en juego. Por eso, te ofrecemos algunos consejos para que termines tu primer día de trabajo sintiéndote como un ganador. Lo primero que debes saber es que parte fundamental de tu integración a la empresa se mide en la preparación con la vengas y en la forma de relacionarte con tus compañeros. Sobre la preparación, conviene entender que informarse tanto como sea posible del funcionamiento básico de la empresa, los valores a los que le dan mayor relevancia y el rol que asumirás, ayudará a reducir tu ansiedad. Recibirás una sobrecarga de información mientras aprendes sobre la compañía, por lo que no debes tener reparos de preguntar lo que no comprendas. Sobre las relaciones interpersonales, se aconseja mostrar interés en conocer a las personas y los roles que desempeñan. Mantente empático, curioso, con ganas de aprender y compórtate con naturalidad, no busques destacar en la primera oportunidad pues podrías crear tensión entre tus compañeros. Enfócate en realizar con efectividad y prontitud aquellas labores que te hayan asignado y gozarás de la tranquilidad del deber cumplido.